En una emotiva actividad organizada en la Escuela Básica Oasis en el Desierto, en la localidad de Pintados, comuna de Pozo Almonte, los estudiantes conmemoraron el Día Mundial Contra el Trabajo Infantil. La jornada, impulsada para sensibilizar a la comunidad sobre la vulneración de derechos que implica el trabajo infantil, reunió a estudiantes, autoridades regionales y diversas entidades comprometidas con la erradicación de esta problemática.
El evento contó con la presencia del Seremi del Trabajo y Previsión Social, Ignacio Prieto, quien explicó a los niños y adolescentes presentes que el trabajo infantil implica labores que exigen dedicación excesiva —más de 21 horas semanales— y que ponen en riesgo su salud, robándoles tiempo de juego, descanso y, sobre todo, de educación. «El trabajo infantil es una de las peores formas de vulneración de derechos; aparta a los menores de una infancia plena y limita su potencial», afirmó Prieto, recordando que la infancia es una etapa para aprender y desarrollarse, no para trabajar.
Vania Llantén, Seremi del Deporte, subrayó la importancia de que los niños y niñas estén en las aulas y practicando deporte, actividades esenciales para un desarrollo integral. «Es fundamental que visualicemos esta problemática y comprendamos que los menores deben estar en un ambiente de aprendizaje, desarrollando sus talentos, compartiendo con sus pares y no trabajando», sostuvo Llantén.
La actividad fue organizada en conjunto por la Delegación Presidencial del Tamarugal y la Seremi del Trabajo, y contó también con la participación de la Seremi de Agricultura y SENDA. Esta colaboración interinstitucional busca fortalecer los esfuerzos regionales para hacer de Chile un país libre de trabajo infantil, a través de políticas de sensibilización y prevención.
El impacto del trabajo infantil
Según la Organización Internacional del Trabajo (OIT), el trabajo infantil se define como aquellas actividades que privan a los menores de su derecho a una infancia plena y ponen en peligro su desarrollo físico y mental. La OIT advierte que esta práctica obliga a muchos niños a abandonar las aulas o a cambiar la escuela por extensas jornadas laborales, impidiéndoles adquirir habilidades educativas fundamentales y robándoles su dignidad y potencial.
La conmemoración en Pintados destaca la importancia de educar a las futuras generaciones y a las comunidades sobre los riesgos y daños que el trabajo infantil representa. La sensibilización y el compromiso de todos son claves para erradicar esta problemática y asegurar que los niños y niñas crezcan en un entorno seguro, dedicado a su educación y bienestar.
