En un histórico encuentro, los dirigentes de los gremios del comercio establecido y de empresarios MIPYMES, que representan a las 16 regiones del país, manifestaron su posición respecto a la propuesta de reforma tributaria impulsada por el Ministerio de Hacienda. El documento, fruto de intensas deliberaciones, destaca los siguientes puntos críticos:
CONCLUSIONES PRINCIPALES
1. Incumplimiento de compromisos tributarios:
Se señala que la reforma contradice el compromiso gubernamental de mantener la tasa de impuesto del régimen PROPYME en un 12,5%, anunciando en cambio un alza escalonada hasta el 25%. Este cambio, según los gremios, golpeará severamente a las pequeñas y medianas empresas, afectando su sostenibilidad.
2. Complejidad para el régimen transparente:
El régimen que debía facilitar la formalización de las MIPYMES se complejiza con exigencias adicionales como la determinación de capital propio tributario, pago de patente y nuevas obligaciones contables y tributarias. Estos requisitos incrementan los costos y riesgos de multas, desincentivando la formalidad.
3. Proliferación de regímenes tributarios:
La creación de nuevos regímenes, como el monotributo transitorio y el monotributo social, junto con el mantenimiento de otros regímenes preexistentes, añade más confusión al sistema tributario, en lugar de simplificarlo. Esto, según los dirigentes, atenta contra la equidad horizontal, que garantiza que dos contribuyentes con ingresos similares paguen los mismos impuestos.
4. Impacto del régimen dual:
La propuesta incluye un régimen dual para MIPYMES, que en ciertos casos las equipara a grandes empresas. Esto podría generar costos adicionales de cumplimiento e imponer cargas tributarias excesivas para pequeñas y medianas empresas, afectando su capacidad contributiva.
PROPUESTAS DEL GREMIO
Ante este escenario, los gremios proponen lo siguiente:
– Mantener la tasa del 12,5% en el régimen PROPYME:
Se solicita que el compromiso de mantener esta tasa sea incorporado formalmente en una ley miscelánea, siguiendo precedentes como la Ley N.º 21.578. Esto garantizaría estabilidad y previsibilidad para las más de tres millones de MIPYMES del país.
– Estabilidad y simplificación tributaria:
Se exige un período de tranquilidad para las MIPYMES mientras se trabaja en la sistematización y simplificación de los regímenes tributarios. Además, se insta a cumplir con el principio constitucional de igualdad ante las cargas públicas.
UN LLAMADO A LA REFLEXIÓN Y AL DIÁLOGO
Los dirigentes del comercio establecido y de las MIPYMES recalcan que esta reforma, en su forma actual, no solo pone en riesgo la sostenibilidad de miles de pequeñas empresas, sino que también atenta contra la equidad y la competitividad del sistema tributario chileno.
Hacen un llamado al Gobierno a escuchar las preocupaciones de los pequeños empresarios y a trabajar conjuntamente en soluciones que realmente fortalezcan el crecimiento económico y la formalización, sin sobrecargar a quienes son el motor de la economía nacional.
Los gremios reafirman su disposición a dialogar y construir una reforma tributaria que beneficie a todos los sectores de manera justa y equitativa.