Este domingo será el día Internacional de la Reducción de Desastres, una fecha que gira en torno al papel de la educación en la protección y el empoderamiento de niños, niñas y adolescentes para un futuro sin desastres.
¿Cómo podemos aportar?
Ximena Espinoza Espinoza, coordinadora académica de Prevención de Riesgos de IACC, señaló que “en el caso de Chile, se han hecho grandes avances como contar con construcción antisísmicas reguladas por el Estado para garantizar que los edificios y estructuras cumplan con los estándares de resistencia sísmica; un Plan Nacional de Cortafuegos”.
La especialista detalló que esto último “consiste en la construcción de fajas libres de vegetación entre las regiones de Atacama y Magallanes, que buscan contribuir a la prevención de incendios forestales; también contamos con el Plan Integral de Seguridad Escolar, una herramienta destinada a la comunidad educativa que aborda diferentes amenazas a los que están expuestos los establecimientos educacionales y aporta al desarrollo de una cultura nacional inclusiva de autocuidado y prevención de los riesgos”.
Además, recordó que existe el “sistema de alerta temprana Nacional del SENAPRED (Servicio Nacional de Prevención y Respuesta ante Desastre, que define el estado de atención de la comunidad frente a un evento adverso, según su probable y cercana ocurrencia”.
“Pero la ciudadanía también debe tener en cuenta ciertas acciones, sobre todo educar a niños y niñas sobre la prevención y respuesta a desastres. Lo anterior, a través de actividades interactivas, se les puede instruir sobre cómo actuar frente al inicio de sismos o terremotos, incendios e inundaciones, y las señales de advertencia asociadas a cada uno”, sostuvo.
“Otro aspecto clave es enseñarles el uso de herramientas prácticas como la mochila de emergencia, que debe estar equipada con elementos esenciales como agua, alimentos no perecibles y un botiquín de primeros auxilios”, agregó.
Sin duda es clave inculcar hábitos que ayuden a proteger el medio ambiente, porque “esto forma parte de la prevención a largo plazo, ya que el cuidado de los recursos naturales puede mitigar desastres como inundaciones o incendios forestales”, finalizó.