El secretario de Estado sostuvo que, si bien se continúa realizando el catastro de afectación silvoagropecuaria en las zonas afectadas por las lluvias, las proyecciones preliminares indican que habrían cerca de ocho mil agricultores con algún grado de afectación.
Tras las intensas lluvias, nevadas y crecidas de ríos que afectaron a la zona centro sur del país, el ministro de Agricultura, Esteban Valenzuela, se desplegó por las provincias de Talagante y Melipilla para monitorear el grado de afectación en la zona.
El secretario de Estado recorrió las comunas de Talagante, María Pinto y Curacaví, donde se han producido daños en las praderas de pastoreo, cultivos, colmenas y otras infraestructuras pecuarias. “La afectación es más acotada que el año pasado, pero en algunos lugares golpeó y duro. Acá en María Pinto es evidente, como también lo es en San Vicente de Tagua Tagua y en Arauco, donde 350 agricultores se vieron afectados”, sostuvo el ministro Valenzuela, quien también explicó que “estamos avanzando en la ficha de afectación agrícola muy rigurosa, con los municipios”.
Asimismo, el secretario de Estado, quien también ha monitoreado de cerca los daños provocados en las regiones de O`Higgins y Biobío, explicó que “vamos a trabajar para ayudar a los usuarios INDAP y no INDAP, vamos a conversar con el gobernador Claudio Orrego para buscar recursos convergentes, porque los agricultores no pueden quedar abandonados y tenemos que dar capital de trabajo, créditos y ayudas directas también y estamos ahora en ese trabajo”.
Por su parte, la alcaldesa de María Pinto, Jessica Mualim, afirmó que “esta ha sido una zona muy golpeada ya que es una taza que se saturó de agua y recuperar la humedad que requieren los productos va a costar. Todo lo que tenían los agricultores para cosechar se va a podrir y va a ser difícil tener los productos en el tiempo en que los mercados esperan. Por esto, la ayuda de los ministerios de Agricultura, de Economía y de Desarrollo Social, entre otros es muy relevante”.
La subsecretaria de Servicios Sociales, Francisca Gallegos, agregó que “estamos constatando y contribuyendo a una aplicación efectiva y expedita de la ficha básica de emergencia, que va a permitir medir la afectación de los hogares y de las viviendas de cada familia”. Además, la subsecretaria dijo que “estamos con el ministerio de Agricultura en una acción coordinada de las diferentes instituciones van a permitir resolver los problemas en términos del desarrollo social, pero también del desarrollo económico y agrícola de las zonas afectadas”.
En ese sentido, la subsecretaria de Servicios Sociales señaló que “sabemos que el proceso de recuperación es lento, pero el sentido de oportunidad de las ayudas tempranas requiere que sean abordadas hoy y que lleguen lo más rápido posible para sentar algunas mínimas tranquilidades para las familias, como nos ha pedido el presidente Boric”.
Desde la Delegación Presidencial Provincial de Melipilla, Sandra Saavedra, afirmó que están “abocados a realizar todas las obras de mitigación, de reparación y de prevención para un siguiente frente. Además, estamos estregando todo el apoyo a los ministerios y a las distintas instituciones para el apoyo de las comunas de María Pinto y Melipilla, que fueron las más afectadas”.
“También estamos apoyando con la aplicación de la ficha básica de emergencia por parte de los municipios y la subsecretaría de desarrollo social y ahora procedemos a aportar en la aplicación de la ficha de afectación agrícola”, añadió la delegada Sandra Saavedra.
Apoyo para pequeños y medianos agricultores
Durante la jornada, el ministro de Agricultura sostuvo que hay cuatro mil agricultores afectados en las regiones de Biobío y La Araucanía y “estamos en estos tres días que vienen en pleno proceso de las fichas de cuantificación de los afectados ahora entre Región del Ñuble y RM”.
Además, el ministro Valenzuela afirmó que “las proyecciones preliminares nos indican que, en total, sumando los cuatro mil iniciales, nos vamos a acercar a los siete mil a ocho mil agricultores, porque insisto fue menos duro en estas zonas de lo que ocurrió el año pasado con las dos tormentas”.
En esa línea, el secretario de Estado explicó “aquí hay dos tipos de ayudas: las ayudas tempranas, que es la entrega de alimentación para abejas, gallinas, animales. En segundo lugar, los bonos de recuperación económica, que según el daño se entregaron el año pasado y donde la mayoría se ubican entre uno y tres millones de pesos, y en algunos casos hasta cinco cuando la afectación fue mayor; ese capital de trabajo se combina con el crédito de Indap y el crédito Siembra por Chile del BancoEstado”.